miércoles, 15 de julio de 2009

Dos cosas que rodaron en mi cabeza...

Hoy me levanté cavilando en el pasado supuse que iba ser un día mas sin encontrar a la persona correcta, esa persona que día tras día cambia de una forma radical y sin sospecha alguna pierde su autenticidad, que el laberinto que se aleja no podrá volver jamás y este día, decidí tomar un baño y me dije…
¿Por qué no me doy mi tiempo de pensar en mi, de saber que me gusta y de saber que no?
Cuando pasaba el jabón por mi cuello, recordé lo bien que me hace sentir una pequeña caricia de alguien querido. Mientras seguía su camino, descubrí el olor a mi, ese olor que recuerda mi ser, mi delicadeza.
Mientras caían las gotas, se quedaban en mi mano, me hicieron recordar cada una de esas lágrimas que gaste pensando en como ser.
Descubrí que al acondicionador no le importaba que hubiera en mi cabeza, solo hacia su trabajo. Entonces llegué a la conclusión, que yo soy una persona que solo hace su labor en esta vida, que no tengo que estar poniendo poses al aire.
Solamente soy y no puedo dejar de hacerlo y llego a la conclusión que "soy yo".



Recordé también que hace tiempo, me preguntaron ¿Tú sabes perdonar? Y respondí a esto con un suspiro de resignación.
¿Que les puedo decir?... creo que si. Ya he perdonado a muchos. Ya no siento lo mismo que antes, cuando mancillaron mi inocencia, cuando mi mundo debió solo ser de inocentes juegos, donde crearon ellos una nube de perturbaciones que no entendía.
Si era bueno o malo no lo comprendía.
Solo se que el tiempo y Dios me ayudaron a sacudirme de ese ambiente, que con el paso del tiempo todo fue cambiando.
Y gracias a ello mi vida dio un giro de 360 grados. Hoy soy feliz me desligo cada día de esos momentos, y ya no trato de encontrar el porque, ni el como me sucedió a mi.
Solo se que los he podido perdonar, hacer como si nada hubiera pasado. Pero sin embargo, por esas cicatrices que quedaron de aquellas heridas en mi alma... "perdonar si... olvidar no".

No hay comentarios:

Publicar un comentario